Pastel de calabaza sin horno: el postre fácil y cremoso del otoño
¿Buscas un postre fácil, sin horno y con sabor a otoño? Entonces este pastel de calabaza sin horno te va a enamorar. Es suave, cremoso y se prepara con muy pocos ingredientes. En menos de 20 minutos tendrás un dulce que sabe a hogar y a temporada.
Este pastel combina lo mejor de la calabaza con una textura tan cremosa que recuerda a un flan o una tarta de queso. Es una receta que triunfa tanto en reuniones familiares como en meriendas de otoño. Además, puedes personalizarla con especias o una base de galletas si quieres darle un toque extra.
Ingredientes
- 300 g de calabaza cocida
- 200 ml de nata o crema de leche
- 100 g de azúcar (puedes ajustar al gusto)
- 2 huevos
- 1 cucharadita de canela (opcional)
- 1 base de galletas (opcional)
Preparación paso a paso
- Cuece la calabaza hasta que esté bien tierna. Escúrrela y deja que se temple unos minutos.
- Tritura la calabaza junto con la nata, el azúcar, los huevos y la canela hasta obtener una mezcla suave y sin grumos.
- Vierte la mezcla en un molde forrado con base de galletas o directamente en uno engrasado si prefieres sin base.
- Cubre con film y deja que repose en la nevera al menos 4 horas, o hasta que tenga consistencia firme y cremosa.
- Desmolda y decora con un poco de canela espolvoreada o nata montada.
Consejos y variaciones
- Si quieres un sabor más intenso, añade una pizca de jengibre o nuez moscada.
- Para una versión más ligera, sustituye la nata por yogur natural.
- También puedes preparar una base de galletas trituradas con mantequilla para darle más cuerpo.
El toque final
Lo mejor de este pastel es que se prepara sin horno, con ingredientes sencillos y un resultado de pastelería. Es ideal para aprovechar la calabaza de temporada y disfrutar de un postre otoñal que encantará a todos. Anímate a hacerlo en casa y verás cómo se convierte en uno de tus favoritos.
Víctor Fernández – La Cocina de la Abuela
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